El Departament de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat de Cataluña ha adjudicado, por un importe de 4,5 millones de euros, la obra para extender un nuevo tipo de pavimento en la autopista C-31. Se trata de un asfalto con propiedades fonorreductoras, e incluye un tratamiento fotocatalítico que ayuda a captar la contaminación del dióxido de nitrógeno.
La redacción del proyecto se iniciará el próximo mes de junio, según fuentes de la conselleria, y la ejecución de la obra abarcará una extensión de siete kilómetros. Según fuentes del departamento, una parte de la obra se ejecutará este año y otra el año próximo, ya que se actuará cuando pase la temporada invernal.